Cristina Gutiérrez ha superado este lunes la primera parte de la etapa maratón del Dakar, entre La Paz y Uyuni. Al no permitirse el trabajo de las asistencias en el campamento, la prioridad absoluta de la piloto burgalesa era llevar el Mitsubishi Montero a la meta sin contratiempos, para no comprometer la integridad de la mecánica. Era uno de esos días en los que no hay nada que ganar y sí mucho que perder. Pero Cristina se ha mantenido fiel a su libro de ruta particular, con la meta de Buenos Aires marcada en rojo, y ha completado la especial en la 46ª posición, a 1 hora, 14 minutos y 4 segundos del líder. En la general, ocupa la 50ª posición, la sexta en la categoría T1.S.
“Hemos pilotado conservando mucho el coche y está enterísimo, después del gran trabajo de ayer del equipo, en la jornada de descanso”, comenta la joven odontóloga. Además, Cristina tiene un as en la manga. No en vano, su copiloto Pedro López es mecánico y la tripulación sí puede trabajar en el coche en el vivac de la etapa maratón, siempre con los medios de a bordo. “Si pasase algo, tener a Pedro al lado es una garantía. Además, en el coche llevamos algunos recambios básicos”, explica la piloto del equipo DKR Raid Service.
La etapa del día ha ido muy bien para la joven debutante de 25 años: “No hemos tenido ningún problema”, asegura. Inicialmente, la especial estaba programada a 322 kilómetros, pero se tuvo que acortar a 161 debido al mal estado del terreno en determinados tramos, tras las fuertes lluvias que han caído en la región. “Era todo fuera de pista, con mucha arena y algunas dunas. Se nos ha dado muy bien y no nos hemos perdido en ningún momento”, relata, intentando contener el entusiasmo ante una experiencia que cada día que pasa suma nuevos aspectos positivos.
El recorrido total de la jornada de hoy ha sido realmente maratoniano, con nada menos que 801 kilómetros, incluidos los enlaces. Mañana martes (por hoy) lo será aún más. La segunda parte de la etapa maratón constará de 892 kilómetros, con una especial de 492 kilómetros, la más larga de la prueba tras la anulación de la sexta etapa. “Seguro que será muy duro. Habrán sido muchos kilómetros sin asistencia, pero estamos preparados”, afirma Cristina. El Dakar dejará Bolivia y entrará de nuevo en Argentina, país que ya no abandonará hasta el final del rally.