Con la presencia de Raúl Pelayo (Director General de Industria, Comercio y Consumo del Gobierno de Cantabria), Lorenzo Vidal de la Peña (Presidente CEOE Cantabria), Clara Velasco (Subdirectora de Automoción GLP Repsol), Gerardo Gómez (Director General del Grupo San José López), Vicente Díaz (Catedrático y Director Dpto. Ingeniería Mecánica Universidad Carlos III Madrid), y Jesús Salmón (Presidente Honorífico de Ferrosite), se presento en las 
instalaciones de Ferrosite en Renedo de Pielagos, el primer vehículo pesado, en este caso un Iveco 420 Euro VI transformado en dual-fuel, con la peculiaridad de ser el primero en España con la Tarjeta ECO. Un trabajo que ha llevado varios meses de investigación y que confirma el trabajo en desarrollo e investigación que la empresa cántabra esta desarrollando, siendo una referencia en el sector a nivel europeo.
Además de este primer camión con tarjeta Eco, Ferrosite también dio a conocer sus últimos trabajos en varios vehículos ligeros con motores Pure Tech de tres cilindros e inyección directa transformados a GLP, así como dos vehículos industriales como el Citroën Jumper y una Renault DCI 170 Energy.
En este acto también se presento el nuevo banco de potencia que Ferrosite ha instalado en Renedo de Piélagos, siendo una de las instalaciones más modernas de España y en la que los asistentes pudieron ver en directo como se realiza una prueba donde se miden un sin fin de parámetros para conocer potencias y rendimiento de los motores en todo tipo de situaciones.
En el acto de presentación, Jesús Salmon comento que: “El acto de hoy es el primer paso del acuerdo firmando hace unos meses entre la firma Repsol y la empresa cántabra Ferrosite y que ha contando con la colaboración de la empresa San José López como propietaria del camión dualizado presentado hoy”. Salmón también destaco “las desproporcionadas subvenciones que hoy están recibiendo los vehículos eléctricos, que cuentan con unas subvenciones escandalosas y mal empleadas. Los productos que desarrolla la empresa Ferrosite son capaces de amortizarse, mientras que los vehículos eléctricos son en este momento muy caros y siguen teniendo una autonomía muy limitada. Es imprescindible, cuando se desarrolla una nueva tecnología, hacer un estudio de viabilidad económica”.
