Los hermanos Benavente han tenido en la jornada de hoy una etapa muy movida. La segunda jornada de la etapa maratón se ha desarrollado por pistas muy rápidas y dunas en las que los hermanos Benavente han disfrutado, ademas de que su Nissan ha aguantado las reparaciones de emergencia realizadas en la jornada de ayer en la pequeña asistencia de dos horas de que disponían.
Según nos cuentan los hermanos Benavente desde la prueba, hoy al terminar la última especial se encontraban al pequeño de los Benavente, Pablo, que junto a su piloto Sergi Fernández habían sufrido la rotura de los dos amortiguadores de la rueda delantera izquierda, no dudando en parar y ayudarles a reparar para poder continuar. “De dos hicimos uno, lo pusimos y a por las dunas… Brutal”.
También ayudaron a un equipo Suizo que se había quedado trabado en la arena, demostrando que los Benavente conservan ese “espíritu Dakar” que muchos dicen que se está perdiendo.
Al termino de la etapa han sido penalizados por la organización con 1977 puntos por llegar tarde, penalización que han reclamado a la organización y que les retrasa en la general hasta el puesto 26. Sin esa penalización, estarían décimos de la general.
Aún queda mucho por delante, pero los Benavente están demostrando, ademas de una buena competitividad, tener muy presente ese “espíritu Dakar” que muchos están olvidando.
¡¡Animo!!