Isidre Esteve acaricia su gran objetivo de acabar el Dakar 2017, el año de su reaparición en coches. El piloto de KH-7, Repsol y Onyx Seguros está a una única jornada de cumplir su sueño y, además, está demostrando llegar a los últimos días en plena forma. Este viernes, el ilerdense ha firmado otra gran actuación, al terminar 37º absoluto en coches y 3º de su categoría T1.S.
La penúltima especial partía desde San Juan dirección a Río Cuarto, con 759 kilómetros, 292 de ellos cronometrados. La carrera se dividía en dos sectores y, en el primero, Isidre Esteve ha confirmado la progresión mostrada en los últimos días. Con su Mitsubishi en perfectas condiciones, ha pilotado a muy buen ritmo, para terminar en 35º lugar al paso por el punto intermedio.
“La primera parte ha sido muy técnica, inicialmente por pistas de arena tipo motocross y después con fesh fesh. A pesar de ello, hemos ido bastante bien y hemos vuelto a pilotar a un buen ritmo. Estamos contentos porque, una vez más, demostramos ser competitivos cuando no tenemos ningún problema”, valoraba con satisfacción Isidre Esteve.
La segunda parte de la especial constaba de 173 kilómetros sobre un terreno más rápido que ha vuelto a poner a prueba al KH-7 Rally Team. “Íbamos muy bien, hasta que se ha aflojado una rótula de la rueda trasera. Habremos perdido alrededor de 20 minutos, pero lo importante es que se ha encontrado rápido el problema y Txema Villalobos ha podido solucionarlo para seguir adelante. En general, ha sido otro buen día, en el que nos hemos vuelto a divertir”, reconoce el piloto de Oliana.
Gracias a la labor mecánica del copiloto de Calonge, han logrado cruzar la línea de meta en 37º lugar, lo que les permite escalar algún puesto en la general para situarse 34º provisional. Su tiempo final ha sido de 5 horas, 29 minutos y 25 segundos, el tercero mejor entre los T1.S, categoría en la que se mantienen cuartos en la acumulada.
Este sábado, último día del Dakar, con salida en Río Cuarto y llegada triunfal en Buenos Aires. Por el camino, 786 kilómetros, incluidos los postreros 64 cronometrados que Isidre Esteve tratará de saborear al máximo: “Saldremos a disfrutar y a vivir la fiesta de Buenos Aires con emoción. Tenemos unas ganas terribles de acabar y una ilusión descomunal. Nos sentimos muy felices porque nuestro proyecto está a punto de culminar con éxito”.